No acostumbro a escribir otra cosa en este blog que aspectos técnicos. Pero esto que he leído y que paso a comentar ahora, realmente no puedo dejarlo pasar. Porque lo considero grave y porque en cierto modo me atañe en lo que respecta a mis intereses.
Hace unos cuantos días, la secretaria de Estado de Investigación del gobierno de España, Carmen Vela, dijo en declaraciones para la revista Nature, que en España sobran investigadores. En concreto dijo: «Tenemos que cambiar el número de investigadores manteniendo y mejorando la calidad de los contratos mientras que reducimos la cantidad».
He decidido comentarlo aquí porque queda más destacado, porque es una realidad que conozco y porque seguro que si escribo un comentario bajo la noticia de un medio español, me censurarán, considerando la tendencia «centrista» de la mayoría de ellos. Y honestamente yo también lo haría, porque voy a decir las cosas tal como las siento ahora.
Lo primero que debo decir es que esta mujer, supuestamente Dra. en Química, claramente no tiene conciencia de la enorme idiotez que ha dicho. Aunque en general, creo que ella no es más que la representación de lo que el gobierno español es en este momento, un gobierno tecnocrático, superficial y claramente desconectado de los problemas reales de la gente. Sólo en ese concierto se puede entender que un gobierno ponga en un puesto tan importante a alguien tan increíblemente perdida.
Por supuesto, esta «Sra.», posterior a sus dichos, hizo «algunas aclaraciones», que no es sino un eufemismo para reconocer que la había «embarrado» sin tener que pedir disculpas, y señaló que en realidad se refería a los investigadores jóvenes, que recién llegaban al trabajo, pero como suele suceder cuando un gobierno en realidad no tiene la menor idea de sus planes a futuro, aparecen campañas como ésta:
Entonces, ¿en qué quedamos? Se invita a las mujeres a ser parte de la ciencia y la investigación y sin embargo, al mismo tiempo se señala que se recortarán los fondos destinados a incorporar científicos jóvenes. Mención aparte es lo estúpido del spot, pero eso lo comentaré después. Es de una esquizofrenia brutal, pero entendible, en particular en un gobierno al que NO le interesa la ciencia en lo absoluto y se vale de una infame retórica asociada con la calidad o el fomento de la calidad, para compensar los recortes. Primero y más importante, habría que hacer un diagnóstico previo de la actual calidad de la ciencia española, asunto en el cual al gobierno de Rajoy, especialmente a su gobierno, no le reconozco autoridad alguna. Al respecto, habría que recordar algunas cosas, que claramente estos funcionarios públicos no saben:
- Sin jóvenes, la ciencia simplemente muere. Si bien es cierto que los científicos «seniors» administrativamente son los responsables de muchos proyectos, son los jóvenes los que realmente hacen el trabajo sucio, experimentado en laboratorios, escribiendo los papers, proponiendo nuevas modificaciones a viejos trabajos, revisando y actualizando bibliografía, etc. Sin investigadores jóvenes, los científicos más viejos verían reducida su productividad de manera dramática.
- Jamás en España ha sobrado el dinero en investigación, al menos en la realidad que yo conocí, siempre me quedó claro que los fondos eran escasos y si bien la realidad no era la misma que en países latinoamericanos, donde simplemente no hay dinero alguno, en España, la escasez de dinero se evidenciaba en muchas cosas, como por ejemplo dinero para viajes, estancias en otras universidades, invitación a académicos extranjeros, costos de cursos de perfeccionamiento, etc. Decir que sobran científicos es decir que se malgasta el dinero para mantenerlos, como si éste ya abundara, lo que es derechamente mentira y me consta.
- ¿Financiar la calidad? ¿y quién decide esto? ¿gente como la Sra. Vela?, ¿políticos, funcionarios públicos sentados detrás de un escritorio en una cómoda oficina de Madrid?. No me hagan reír, o mejor, no me hagan llorar. ¿Un grupo de funcionarios decidiendo sobre cuál investigación es de calidad? Y lo que es peor, ¿de dónde diablos se extrae la extendida idea de que la investigación sólo es fructífera?, ¿no hay error en investigación? y acaso ¿no se aprende de los errores también? Como bien decía un filósofo al que conocí -aunque él lo decía en tono sarcástico- «el cementerio científico está lleno de proyectos sin resultados». Es cierto, pero gracias a ese cementerio están vivos -y muy vivos- muchos proyectos científicos de interés. Por lo demás, la investigación es de buena o mala calidad en virtud de sus recursos, ninguna idea es de por sí rechazable si se inserta correctamente dentro de las áreas disciplinares. Además, el método científico prescribe el error dentro de sus resultados, sin ello no se avanza. Entonces, ¿qué es ciencia de calidad?, ¿la que se publica en revistas indexadas?, ¿la que gana concursos públicos?, ¿la que obtiene el respaldo de la comunidad científica?, ¿la que produce resultados prácticos o aplicados? En todos estos casos, me consta que la respuesta es un NO evidente. Ahora, si lo que van a hacer los españoles es tomar los trabajos de otros países europeos y replicarlos, entonces comprendo, refritos eternos con resultados asegurados de los que DE VERDAD seguirán haciendo ciencia en Europa y se arriesgan a nuevas ideas.
Estoy seguro que ningún país con políticos con algo más de dos dedos de frente, pensaría siquiera en recortar el trabajo científico bajo ningún pretexto. Primero que recorten los fondos para mantenimiento del arsenal militar, que recorten el dinero de festivales y fiestas, antes que matar el alma del desarrollo no sólo de un país, sino de la humanidad entera. Eso como latinoamericano lo sé muy bien, condenados a vivir de las cosas ya probadas en otros países.
Mención aparte es el video comentado anteriormente, el epítome de la imbecilidad y de la expresión más clara y evidente de cómo funciona el pensamiento de algunos ultraconservadores en torno a la sexualidad, la mujer, la ciencia y su rol en ella. Supongo que la idea era «sacar a las mujeres de la cocina o de los cafetines del centro» sin siquiera tomar en cuenta que tanto en España y en otras partes del mundo, hace mucho rato que las mujeres están equiparadas en derechos y deberes con los hombres. Esta mirada sexista y retrógrada no puede venir sino de retrógrados valóricos o gente con ideas de la edad media, sin duda.
Y uno se pregunta, ¿y en qué puto mundo vive esta gente?, ¿de dónde han salido? Es de esperar que tarde o temprano a la inepta Carmen Vela la corran de su cargo, mientras gracias a las maravillosas decisiones de este gobierno español, ya se pueden ir olvidando de las pretensiones -ahora meramente románticas- de Carlos Romeo Casabona: «Europa tiene que liderar la investigación científica mundial»… pero qué digo, seguramente Europa liderará, pero España… España ya no tendrá mucho que aportar, desgraciadamente.